Por primera vez en 98 años de historia, la Asociación Trabajadores del Estado (ATE) tendrá en lo más alto de su conducción a una mujer. Se trata de María Mercedes Cabezas, trabajadora de SENASA y periodista, quien ocupará el cargo de Secretaria General Adjunta.
Por Sofía Acosta
La Asociación Trabajadores del Estado (ATE) es uno de los sindicatos mayoritarios y más antiguos de Argentina: en 2025 cumplirá 100 años desde su fundación. La historia cuenta que un 15 de enero de 1925, tras una asamblea de obreros de los Talleres de la Dirección Nacional de Navegaciones y Puertos, se fundó en el Teatro Verdi de La Boca, el sindicato que representaría a las y los trabajadores estatales.
98 años después, las mujeres tendrán por primera vez representación en lo más alto de su conducción a través de María Mercedes Cabezas, trabajadora del Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (SENASA) y periodista egresada de la Universidad de Lomas de Zamora, quien asumirá en noviembre de este año como Secretaria General Adjunta de ATE Nacional.
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Cabezas comenzó a militar en el sindicato estatal en diciembre de 2003. Al igual que muchas y muchos jóvenes empezó a involucrarse de manera activa en la política y en SENASA no pasó desapercibida: “Lo primero que hicimos fue cerrar nuestro Convenio Colectivo de Trabajo que tiene vigencia hasta hoy”, dice a Feminacida la dirigente de paso corto y apurado pero seguro, durante una movilización en apoyo al pueblo jujeño en la ciudad de Buenos Aires.
Oriunda de Monte Grande, ciudad cabecera del partido bonaerense de Esteban Echeverría, cuenta que en su familia nunca sobró dinero. Viajaba todos los días a la facultad y tenía el presupuesto muy acotado. “Un peso para la ida y otro para la vuelta”, señala entre nostálgica y seria. Uno de esos tantos días, perdió el peso para viajar y comenzó a caminar, un compañero la reconoció y la llevó hasta Monte Grande. Hasta el día de hoy continúan siendo amigos.
La cuestión económica, como a muchos y muchas, atravesó sus estudios. Recuerda también la vez que no tenía dinero para los apuntes y copió de manera manual un libro que tenía que estudiar hasta que sus manos se le hincharon. Cuando llegó a rendir el profesor le preguntó qué le había pasado y ella le contó. Tiempo más tarde, ese mismo docente la puso como ejemplo en una clase. Esta vez, sonríe orgullosa al contar la anécdota.
En 2012 conoció a Emiliano, su pareja, con quien desde 2022 está casada y a quien siempre que puede agradece en público y pone en valor, incluso en actos de campaña, "porque sin él parte de su recorrido militante no habría sido posible", dice. “Muchas mujeres que quieren hacer carrera en la política no pueden porque deben estar abocadas a las tareas de cuidado. En nuestros espacios laborales, sindicales y de militancia debe existir una organización social del cuidado colectivo que permita corresponsabilidad y la colectivización del cuidado. Sin eso no hay debate colectivo posible”, señala Cabezas con ímpetu, durante un encuentro con militantes feministas de ATE en Mendoza.
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En 2015 comenzó a trabajar como secretaria de prensa en ATE - Provincia de Buenos Aires junto a Oscar de Isasi y por supuesto que no le fue fácil. Sin embargo, todo lo asume con compromiso y dedicación, tanto que desde 2019 se desempeña como secretaria de organización en ATE Nacional en la gestión de Hugo “Cachorro” Godoy. “La militancia para mí siempre fue y es una forma de vida”, contesta ante la pregunta de qué significa eso en su cotidianeidad. En noviembre de 2023, con tan solo 44 años, asumirá en uno de los sindicatos más grandes del país.