Trabajadorxs y organizaciones de la infancia denunciaron en el mes de septiembre despidos injustificados, situaciones de violencia laboral y maltrato hacia niños, niñas y adolescentes en los hogares transitorios de la Ciudad. “El día que me comunicaron que me bajaban el contrato me recomendaron ‘aprender a callarme’ para cuidar el trabajo. Por supuesto que mi respuesta fue que cuando se trata de los derechos de lxs pibis no me voy a callar”, aseguró Belén Vallejos, una de las afectadas.
Los Centros de Atención Transitoria dependen del Consejo de los Derechos de Niños, Niñas y Adolescentes (CDNNYA) de la Ciudad de Buenos Aires. Se plantean como espacios de atención integral que permiten alojar de forma transitoria a niñas, niños y/o adolescentes en situación de vulnerabilidad hasta que se resuelva la estrategia de egreso. La mayoría de los casos son de abuso sexual, violencia física, ausencia de vivienda o referentes afectivos. Por la importancia de estos dispositivos, la Asamblea por las Infancias y Adolescencias de CABA exige soluciones a la crisis institucional, carencia de recursos y otros programas necesarios en las intervenciones cotidianas.
A este panorama se suma la fragilidad y precarización de las condiciones laborales de las trabajadoras de estos centros. En su mayoría, son mujeres monotributistas a quienes no se les aseguran derechos básicos. Sufren amenazas, cambios de horario o traslados arbitrarios por cuestionar actitudes tutelares que atentan contra el sistema de protección integral de los derechos de niños, niñas y adolescentes y lxs revictimizan. En este sentido, las operadoras denuncian despidos por persecución ideológica a quienes confrontan prácticas de disciplinamiento como encierros bajo llave o amenazas de suspender vinculaciones familiares por “mal comportamiento”.
Hablemos de derechos
La Ley 26.061 de Protección Integral de los Derechos de Niños, Niñas y Adolescentes sancionada en la Argentina en 2005 expresa el cambio de paradigma en torno a la concepción de la infancia. Este camino se había asentado en el plano internacional con la Convención de los Derechos del Niño, sancionada en 1989 por Naciones Unidas. La normativa reconoce a los chicos y chicas como sujetos de derechos que tienen una voz y opinión a tener en cuenta.
Quienes acompañan día a día a lxs niñxs advierten que frente a múltiples dispositivos de infancias se encuentran funcionarixs cercanos al gobierno de turno que carecen de un enfoque de derechos, formación o trayectoria a la altura de las circunstancias. Por este motivo solicitan que se lxs remueva de su cargo. En diálogo con Feminacida, Belén Vallejos, trabajadora despedida del Centro de Atención Transitoria N°2, repudió la “ausencia de una lógica institucional” y la exhortación a ejercer sus tareas desde el “sentido común”.
“Nos quieren callar por demandar herramientas y capacitaciones para contener a lxs niñxs y por denunciar la falta de ESI en el dispositivo. Nos quieren relegar a que lxs niñxs se encuentren limpios y el lugar en orden, mientras lxs niñxs demandan otro acompañamiento que se les niega”, sentenció.
La falta de explicaciones y respuestas ante su caso deja ver la falta de importancia que el gobierno de Larreta le otorga a las políticas de la niñez y a quienes asumen tareas vinculadas al cuidado, la educación y salud. “No queremos callarnos más ante ésta desprotección, ante esta política pública que se ocupa de vigilar y castigar a lxs niñxs, haciendo foco en su conducta y no en la ausencia de políticas públicas integrales del Estado a lo largo de su historia familiar”, concluyó.
La Junta Interna de ATE del CDNNYA convoca a una concentración el martes 1 de octubre a las 11 de la mañana en el Edificio Cervantes (Perón 3175) para exigir la restitución de los derechos laborales de lxs trabajadorxs de los Centros de Atención Transitoria.