Ciclo Hembra es un evento que incentiva la producción y puesta en escena de piezas teatrales con equipos conformados por mujeres y feminidades en los roles centrales como dirección y dramaturgia. Se llevará a cabo los sábados 17 y 24 de junio a las 21 horas en el teatro Tole Tole (Pasteur 683, CABA). Allí se estrenarán las obras “Ricardo”, de Belén Cañas y “Urana”, de Lucila Quarleri.
En esta entrevista para Feminacida, sus organizadoras, Marina Bazzolo y Sofia Cantarini, cuentan de qué se trata este espacio de creación, experimentación y encuentro entre mujeres artistas.
¿Cómo surgió Ciclo Hembra?
El ciclo nace en un escenario, el del teatro independiente, en el que la autogestión es el único camino para materializar proyectos. Las productoras buscamos, en primera instancia, generar un espacio en el que, con acompañamiento, pudiéramos experimentar el rol de dirección. Luego el ciclo comenzó por sí mismo a tomar la forma de algo más extensivo y comenzamos a definirlo como lo que en ese momento era: un espacio constituido por mujeres que apoyándose mutuamente realizaban sus primeras experiencias en los roles fundamentales del hecho escénico.
La primera edición del ciclo, Monologal, estuvo conformada por las obras de las productoras que también ocuparon los roles de dirección y dramaturgia. Sueño Diurno de Marina Bazzolo, con Gisele Amantegui en actuación; Devolveme a la Selva de Sofía Cantarini, con Sol Kohanoff en actuación; y Morir en carne viva de Natalia Badgen, con Romina Palermo en actuación. También invitamos una cuarta obra, Semental de Ivana Schiaffino, con dirección de Julieta Timossi y la actuación de Car Giurastante. Las obras se presentaron el sábado 11 de junio. Con la primera edición decidimos inaugurar el ciclo con nuestros propios materiales y afirmarnos en el rol de productoras del que aprendemos continuamente. Nos permitimos usar la primera edición como prueba piloto en la que fue tomando forma el proyecto, y encontrando su identidad. Por otro lado, nos dio el primer puntapié para pensar en proyectar esta red a más creadoras que estuvieran con las mismas inquietudes y necesidades que nosotras.
¿Qué expectativas tienen para con esta segunda edición?
Buscamos promover la producción y puesta en escena de textos y equipos conformados mayoritariamente por mujeres y feminidades; que el ciclo se fortalezca como espacio que propicie además de la producción teatral local, la capacitación, el acompañamiento y la experimentación escénica; y que el ciclo crezca a nivel de difusión y participación en la comunidad de la ciudad de Buenos Aires y pueda funcionar periódicamente con convocatoria abierta.
Para esta segunda edición, realizamos la primera convocatoria de forma abierta, en la que recibieron materiales de todo el país. Nos encantaría en próximas ediciones contar con el presupuesto necesario para poder invitar obras de otras provincias. El proceso de curaduría y tutorías fue realizado por Marina Bazzolo y Sofía Cantarini. También proyectamos, a medida que el ciclo crezca en volumen de convocatoria, contar con otras dramaturgas y directoras para que participen en esta instancia de selección.
¿Qué significa este proyecto dentro del teatro independiente?
Observamos también que en los roles de dirección y dramaturgia las mujeres y feminidades no ocupan un lugar preponderante en la escena de nuestra ciudad, entonces el ciclo se convirtió en nuestra manera de ocupar aquellos espacios que hasta el día de hoy resultan dificultosos de acceder para mujeres y feminidades. Un acontecimiento específico que nos reafirmó de alguna manera en esta búsqueda fue el anuncio de la programación del Complejo teatral de Buenos Aires (CTBA) 2023: de 24 obras programadas para ese año, solo una era de una dramaturga y había solo dos mujeres ocupando roles de dirección (y una de ellas en co-dirección). Esta situación nos recordó algo que ya sabíamos: aunque parezca una discusión saldada, aún no gozamos de los mismos espacios de poder que los hombres. El ciclo se constituyó como una manera de proveernos a nosotras mismas la posibilidad de ocupar los roles que queremos y no los que podemos.
¿Qué se llevarán lxs espectadores que disfruten de esta edición del ciclo?
Las obras seleccionadas fueron aquellas que se proponían experimentar en el lenguaje y que ofrecían algo peculiar y específico en su poética y que tuviesen un potencial de crecimiento durante el proceso del montaje en el marco del ciclo, y también en su posterioridad. Quisimos poner el foco en brindar un espacio de experimentación y prueba, para llegar a una primera versión de la obra, sin que el objetivo sea arribar al estreno con un material cerrado. Creemos que las obras nunca se encuentran ¨cerradas¨, siempre siguen su proceso adaptándose a cambios de épocas, elencos, espacios, versiones, etc.
Sobre "Ricardo", de Belén Cañas
Laura recuerda, evoca inicios: cómo conoció a Ricardo, por ejemplo. Los comienzos de las historias se le dan fácil. No pasa lo mismo con los finales, donde las crisis se vuelven inevitables. Las conversaciones la invitarán a reconocerse. O, quizás, a crearse desde cero. Actúa: Sol Claro.
Sobre "Urana", de Luci Quarleri
Esta es una pieza erótica ecofeminista donde la protagonista debe sobrevivir en el contexto pandémico con la ayuda e su médica y un amigo. Juntxs construyen su propio mundo vegetariano, libre de covid y poliamoroso en la pampa argentina. Actúan: Caro Angriman y Emilio Horrocks.
