Los resultados de las elecciones PASO generaron una gran preocupación a partir de las declaraciones de Javier Milei, el candidato a presidente más votado, que abiertamente propone un retroceso en materia de derechos. A partir de la sanción de la Ley 27.610 de Acceso a la Interrupción Voluntaria del Embarazo, aquella que garantiza el derecho al aborto en todo el territorio nacional, las personas gestantes y les profesionales de la salud están bajo amparo legal.
No obstante, desde Socorristas en red advierten que hoy, más que nunca, el derecho al aborto en Argentina necesita que quienes fueron parte de la marea verde empujen el cumplimiento efectivo del derecho ganado en cada rincón del país. La organización de alcance nacional nació en 2012 y es impulsada por activistas que formaban parte de la Campaña por el Derecho al Aborto Legal, Seguro y Gratuito.
La Red está conformada por colectivas de distintos puntos del país. Articula acciones y acompaña a personas que desean abortar para que lo hagan de forma cuidada, segura y con información precisa. María Elena Ale, quien forma parte de esta organización, da cuenta de algunas de las acciones que se están tomando en los territorios para hacerle frente al avance de estos grupos políticos que amenazan con obstaculizar el acceso a derechos.
“Como principal estrategia, decidimos empezar a hablar en asambleas de los derechos conquistados en estos 40 años democracia, hacer un repaso de ellos y también de la historia del movimiento feminista; un movimiento de lucha que lleva más de 200 años. Es mucho lo que hemos conquistado en las diferentes épocas en cuanto a derechos políticos, civiles, personales y ambientales”, cuenta a Feminacida y agrega que, en estas reuniones de militancia que están llevando adelante, como la semana pasada en la Facultad de Trabajo Social de Paraná y en la provincia de Neuquén, quieren poner el foco en conversar sobre qué implica cada propuesta de los candidatos presidenciales en la vida cotidiana.
“Organizaremos festivales barriales y otras actividades en espacios sindicales y plazas, por ejemplo, para reforzar las estrategias de comunicación”, detalla la entrevistada y advierte: “Buscamos seguir acercando herramientas, información y acompañamiento a quienes decidan abortar para que lo hagan de forma cuidada, libre y feminista. Estamos convencidas de que el derecho al aborto debe continuar en agenda para que sea efectivo”.
El resultado electoral de las primarias abiertas alarmó a las Socorristas y las convocó a redoblar su activismo. "El aborto incomoda a los sectores más conservadores y patriarcales de la sociedad. Venimos señalando con preocupación la obstaculización del acceso al aborto en numerosos espacios del sistema de salud a lo largo del país. Los gobiernos tienen la responsabilidad de garantizar de manera gratuita la política sanitaria, pero además este derecho implica el acceso a información científica y de calidad”, señalan desde la organización.
Magnitud y dirección de los progresos alcanzados a partir de la Ley de IVE/ILE
El reporte Los rumbos de la experiencia argentina con el aborto legal fue publicado en junio de 2023 y da cuenta de la implementación de la política de aborto en Argentina hasta 2022 inclusive. De acuerdo a los datos relevados, hubo un descenso significativo y sin precedentes de la tasa de fecundidad en las niñas y adolescentes. La magnitud de este descenso indica que entre 2018 y 2021, la tasa específica de fecundidad en adolescentes (TEFA), que se define como el número de nacimientos que ocurren durante un determinado año por cada 1000 mujeres de 10 a 19 años, se redujo prácticamente a la mitad: un 43 por ciento para niñas y adolescentes de entre 10 y 14 años, y un 45 por ciento para las de entre 15 y 19 años. Esto indica una reducción del 49 por ciento para el total del grupo de entre 10 y 19 años.
Estos números indican que el aborto legal y voluntario es una realidad en la vida cotidiana de las personas, aún con los problemas propios de las desigualdades entre jurisdicciones y de las barreras al acceso que siguen existiendo. Además, según el mismo informe, entre 2020 y 2021, los porcentajes de embarazos no intencionales en niñas disminuyeron en 8 provincias y aumentaron en 12.
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La no intencionalidad del embarazo es un indicador que muestra cambios positivos. La proporción de mujeres, niñas y adolescentes que la reportan se obtiene a partir del dato de embarazo no planificado que recoge el Sistema Informático Perinatal (SIP). Dentro de esta categoría, se encuentra un espectro de situaciones que van desde embarazos producto de abuso hasta los que son consecuencia del uso inadecuado o falla del método anticonceptivo, falta de previsión y barreras en el acceso a servicios de salud sexual, incluidos los servicios de aborto. El dato estadístico proporciona una visión general de los determinantes sociales, relacionales y personales que interactúan en situaciones diversas y a la vez únicas para las personas, y que se expresan en el reporte de esta variable por la usuaria en algún momento de las visitas prenatales. Además, es importante tener en cuenta que los datos del SIP se limitan a los nacimientos ocurridos en instituciones del subsector público de salud y el registro de esos datos puede variar según las provincias e instituciones.
Si se analiza a todas las mujeres que tuvieron nacimientos sin diferenciar por grupos de edad, se observa que las proporciones de embarazos no intencionales descendieron de 6 de cada 10, a 5 de cada 10 entre 2019 y 2021. El descenso, aunque de distinta magnitud, está presente en casi todas las provincias.
Por otro lado, en 2021, las muertes por aborto continuaron descendiendo: de 23 en 2020, a 13 en 2021. Entre 2019 y 2021, la estructura porcentual de muertes maternas por aborto, otras causas obstétricas directas e indirectas (excluyendo COVID) prácticamente no se modificó. Asimismo, durante el embarazo, parto y puerperio fallecieron más mujeres por COVID (220) que por la suma de todas las causas obstétricas directas e indirectas no relacionadas al COVID (173).
Un nuevo gobierno no puede echar atrás estos avances. El aborto es un derecho que salva vidas y que ya es una política de salud que debe profundizarse, no eliminarse. Es fundamental fortalecer el sistema público de información y promover el monitoreo de las acciones de las obras sociales y las prepagas en el cumplimiento de la ley. Así se podrán tener diagnósticos más ajustados y, con ello, reorientar lo que sea necesario, demandar lo que no se cumpla y fortalecer lo que funciona apropiadamente en materia del derecho a interrumpir el embarazo.
