“Son esos momentos
Un osito de peluche de Taiwán – Los Auténticos Decadentes
en que uno se pone a
reflexionar
y alumbra una tormenta.
Todo es tan tranquilo
que el silencio anuncia el ruido
de la calma que antecede
al huracán”.
Estamos a salvo, ¿de qué? ¿De quiénes? ¿Por cuánto tiempo? Como la calma que precede a la tormenta, los cuentos de Camila Fabbri se sostienen sobre esa tensión. La autora de Los accidentes y El día que apagaron la luz entrega, en esta nueva publicación editada por Seix Barral, 17 cuentos cortos que están unidos por un paratexto común: epígrafes con fragmentos de distintos documentales de National Geographic (Nat Geo) que, a través de la experiencia animal, esbozan algo de la humana.
Así como en la flora y la fauna el accidente está siempre presente, en la vida de les personajes —mujeres y niñes en general— en cada vuelta de página puede desatarse el temporal. Esta nueva publicación de Fabbri se lee con la sensación de que, en cualquier momento, algún párrafo podría presentar algo de esa tragedia que se percibe, pero que no termina de declararse o que, incluso cuando se presenta, no es como la habíamos imaginado.
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Las temáticas que aborda la autora van desde la depresión, el paso del tiempo, la decrepitud, la costumbre en la pareja, la presencia constante de la desaparición, los secretos a voces, la ansiedad, lo inexplicable de la muerte y el cuidado de les xadres. A su vez, los animales tienen un lugar muy protagonista, no sólo desde esos fragmentos documentales, sino también dentro de cada cuento. Un yacaré en una jaula, gatos que se mimetizan con sus dueñes y perros que aparecen en containers. Los personajes de estos 17 cuentos van armando los relatos junto con sus lectores. Como en una sesión de terapia donde el hecho adquiere peso cuando se le pone palabra, así transcurre la prosa de la autora bonaerense que logra una construcción perfecta de cada narradore.
Hay un corrimiento de lo real que no precisa de grandes explicaciones porque el verosímil que construye Fabbri se repite en todos los cuentos y, si bien, hay algo de lo inesperado cruzado por lo mágico —incluso lo siniestro— todo se conecta con las pequeñas tragedias cotidianas. Un acontecimiento que puede presentarse en cualquier momento y cambiarlo todo. ¿Acaso no hay algo de eso en la finitud de nuestros días?
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Hay algo siempre presente en quienes atravesaron una tragedia, un accidente, un estallido, una herida que se abre para dejar una cicatriz que siempre la recuerde. En el caso de Camila Fabbri, esa herida es Cromañón que aparece, no sólo en uno de los cuentos, sino que esa vivencia, esa certeza de que en medio del disfrute todo puede cambiar para siempre, atraviesa todo el libro.
Como recomienda el escritor y poeta chileno, Alejandro Zambra, “hay que leer en voz alta estos relatos, porque en ellos abundan descripciones bellamente caprichosas y un fraseo personalísimo. Es impresionante la capacidad de la autora para mantener en el aire las ilusiones de sus personajes desesperados”.
Tal como anuncia la contratapa “pese a la fragilidad humana que evidencian, la posibilidad de renovarse y sobrevivir es tan real como la magnitud de las amenazas”. La más terrible quizá esté en comprobar que nunca se está del todo a salvo.
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Sobre la autora
Camila Fabbri nació en 1989 en Buenos Aires. Es escritora, directora de teatro y actriz. Dirigió las obras Brick, Mi primer hiroshima, Condición de buenos nadadores, En lo alto para siempre y Recital Olímpico (las dos últimas, en colaboración con Eugenia Pérez Tomas). Por su trabajo como actriz en la película Dos disparos de Martín Reitman, director argentino, fue nominada a los Premios Cóndor de Plata. Publicó Los accidentes, un libro de cuentos editado por Emecé-Notanpüan en 2017; y la novela de no ficción sobre la tragedia de Cromañón, El día que apagaron la luz editada por Seix Barral en 2019 y que fue declara de interés cultural por el gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. En la Feria del Libro de Guadalajara formó parte de la selección “Ochenteros, escritorxs nacidxs en los 80”. El año pasado, la revista Granta la seleccionó como una de las 25 mejores coves narrativas en español menores de 35 años. Sus obras han sido traducidas al inglés y al portugués.