El proceso de investigación de una posible vacuna contra el VIH estaba en su última fase pero, según señalaron los investigadores participantes, debió interrumpirse porque no brindó los resultados esperados. Si bien “era segura”, la prevención de la transmisión no estaba garantizada.
El estudio Mosaico era llevado adelante por la compañía Janssen, el Instituto Nacional de Alergia y Enfermedades Infecciosas de Estados Unidos, la Red de Ensayos de Vacunas contra el VIH (HVTN) y el Mando de Investigación y Desarrollo Médico del Ejército de Estados Unidos. Buscaba probar la eficacia de una vacuna preventiva del Virus de Inmunodeficiencia Humana y se encontraba en la fase 3. De todas las experiencias investigativas de la última década, ésta había sido la única en alcanzar este estadío.
Los ensayos se realizaban en países de tres continentes y las pruebas se realizaron en Brasil, España, Estados Unidos, Italia, México, Perú y Polonia, además de Argentina. El estudio comenzó en 2019 y en septiembre de 2021 alcanzó la inscripción completa de aproximadamente 3.900 personas voluntarias para los ensayos. La decisión de suspensión fue tomada por la Junta de Supervisión de Datos y Seguridad del ensayo que, al analizar la eficacia de la vacuna, visualizó que los resultados no eran suficientes.
No todo está perdido
ONUSIDA, por su parte, pidió que la suspensión del ensayo de la vacuna contra el VIH no sea considerada una decepción y un retroceso. En ese sentido, instó a que se acelere la lucha frente al virus. La directora ejecutiva, Winnie Byanyima, subrayó en un comunicado que “es necesario desplegar las innovaciones disponibles en materia de tratamiento y prevención del VIH, como la profilaxis pre exposición oral, los inyectables de acción prolongada y el anillo vaginal”. Y agregó: "La búsqueda de una vacuna debe continuar, pero es importante recordar que, a pesar de este contratiempo, el mundo todavía puede acabar con el sida para 2030 si ofrece todas las opciones de prevención y tratamiento probadas a todas las personas que las necesitan".
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En Argentina, la Fundación Huésped era uno de los centros de investigación que participaba del proyecto. Al respecto de los resultados, Pedro Cahn, director científico de la fundación, remarcó: “La noticia es frustrante, pero eso no nos tiene que llevar a conclusiones erróneas. Tenemos que seguir buscando una vacuna porque, junto con el agua potable, son las herramientas que han salvado la mayor cantidad de vidas. Mientras tanto, tenemos herramientas que hay que utilizar mucho más: educación sexual integral, promoción del uso del preservativo y el acceso mejorado de testeo para el tratamiento inmediato tras la detección”.
En diciembre, en Argentina el Gobierno formalizó mediante el Decreto 804/2022, la reglamentación de la Ley Nacional 27.675 de Respuesta Integral al VIH, Hepatitis Virales, otras infecciones de Transmisión Sexual y Tuberculosis. La ley establece derechos y garantías básicas como la no discriminación o estigmatización en los ámbitos laborales, educativos, el sistema de salud, o en cualquier otro.
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Además, desde se lanzó una campaña de comunicación masiva de concientización en torno a VIH a través de medios de comunicación, vía pública y redes sociales, con eje en la prevención, el acceso al diagnóstico y al tratamiento oportuno, y la noción de "Indetectable = Intransmisible" a modo de concientizar sobre la discriminación y hacer llegar información confiable que erradique los mitos en torno al virus. La ley, además, contempla un capítulo específico dedicado a las mujeres y personas con posibilidad de gestar que se enfoca en sus necesidades específicas.